Los cambios sociales y la tecnología están intrínsecamente asociados. Las alteraciones en uno de estos dos elementos tiene repercusiones inevitables sobre el otro. Determinados cambios sociales y culturales propician la aparición de nuevas tecnologías y estas, a su vez, suscitan nuevos cambios sociales.
De modo que es comprensible que deseemos adelantarnos a los cambios que se vienen dentro de unos pocos años y conocer el futuro de la tecnología. Además, debido a que ya tenemos conciencia de las nuevas tecnologías que se vienen, podemos hacer algunas estimaciones de los cambios que estas introducirán.
Internet ha sido el último gran avance en materia de impacto social. Gracias a internet han aparecido de forma constante y reiterada nuevas tecnologías que han representado avances hacia nuevas pautas comunitarias y nuevas condiciones sociales y culturales.
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El futuro de la tecnología: implicaciones de los cambios tecnológicos que se avecinan
Mayor presencia de robots en el ámbito del comercio
Para el año 2021 los robots no solo formarán parte de la industria manufacturera. Se estima que para esa fecha estos se encuentren en el despacho de productos tales como medicinas.
Se estima que los robots podrán ser utilizados para despachar medicamentos para el año 2021, lo cual implicará una reducción considerable de empleos, tal como ha sucedido en oportunidades anteriores.
El futuro de la tecnología, en este sentido, implicará cambios de muchos matices y muy probablemente tendrá repercusiones negativas para un grupo social que depende de esta actividad comercial.
Implicaciones de la telefonía móvil implantada
Otra de las estimaciones que se ha hecho, es que para el año 2025 ya existirán dispositivos móviles que se implantarán de forma subcutánea. Se trata de una tecnología que lleva al extremo la idea de estar siempre conectado.
En los últimos años se ha iniciado una gran controversia asociada al uso de la información personal por parte de grandes empresas como Facebook. La introducción de este tipo de tecnología redefiniría la dimensión del problema a niveles mucho más profundos y complejos, por lo que el futuro de la tecnología será un tanto convulso.
Se estima que la tecnología móvil implantada tengan la capacidad de captar datos tales como el estado de ánimo de los usuarios e incluso captar datos tales como los signos vitales. El manejo de información por parte de terceros alcanzaría entonces, niveles antes insospechados.
Mayor presencia digital de la humanidad
Asimismo, en consonancia con lo anterior, se estima que para el 2023 exista una cantidad mayor de personas con presencia en redes sociales. El número de personas conectadas digitalmente tan solo tiende al aumento y esto traerá varias consecuencias que será necesario afrontar.
Si bien algunos autores, como es el caso de Manuel Castells, ven con beneplácito la mayor conexión entre las personas a través de las redes sociales, otros autores conciben que estos espacios son propios de la incomunicación y el desencuentro.
De esta manera, la mayor interconexión de la humanidad no implicará una mayor capacidad de resolver los problemas sociales más apremiantes, ni mucho menos un aumento en la calidad de la comunicación entre las personas conectadas.
Reconocimiento del internet como un derecho humano
También se ha proyectado la aceptación del derecho de acceder a internet como un derecho humano. Se cree que para el año 2024 esto se hará realidad. Si bien en la actualidad se reconoce el efecto de la brecha digital, aún no se admite propiamente que se trate de un derecho humano.
Este hecho estará asociado con la necesidad de estar conectado en todo momento. Incluso se ha hablado de una obsesión contemporánea al referirse a la idea de estar conectado cada segundo del día. En este caso, puede que sea esa “obsesión” lo que suscite ese nuevo cambio tecnológico-cultural.
Nuevamente hay que hacer énfasis en el hecho de que la “mayor conectividad” no es necesariamente una garantía de progreso. Si bien en el futuro de la tecnología se prevé una reducción en los efectos nocivos de la brecha digital, no es necesario perder de vista una postura crítica ante dicha mayor “conectividad”.
Almacenamiento digital del PIB
Con la aparición de las criptomonedas y la demostración de la viabilidad y fiabilidad de estas nuevas formas de almacenar y movilizar riqueza, se tenderá cada vez más a utilizar estas nuevas tecnologías. Por esa razón para el 2027 ya se utilizará incluso para preservar el PIB mundial.
Se cree que para la fecha, el 10% del PIB del mundo estarán depositados bajo esta nueva modalidad. De ser esto cierto, existirán nuevas facilidades para realizar transacciones pero asimismo, también nuevos peligros y obstáculos que superar.
El almacenamiento digital del Producto Interno Bruto, probablemente también implicará mayor control por parte de los entes administrativos de los diferentes países, y también mayores posibilidades de control por parte de los ciudadanos.
Coches sin conductor para el 2026
Otro factor importante a considerar son los coches sin conductor. En la actualidad se sabe que muchos de las muertes por accidentes viales se deben a errores humanos, razón por la cual esta nueva modalidad podrá tener un impacto positivo reduciendo la mortalidad ocasionada por esta clase de accidentes.
De esta manera se reducirá considerablemente el número de decesos por accidentes viales. Asimismo, esto traerá nuevas implicaciones culturales, tales como que cada vez será menos importante aprender a conducir, pudiendo tan solo adquirir un coche totalmente automático.
No obstante, no todo es color de rosa. Así como los coches autónomos podrán representar un gran avance también traerán consigo nuevas dificultades. Hasta ahora se desconoce la seguridad que estos mismos puedan poseer en materia de impenetrabilidad.
Auditorias de negocios realizadas por IA
¿Hasta que punto debemos delegar tareas importantes a las inteligencias artificiales? Es una pregunta que inevitablemente debemos realizarnos tarde o temprano. No obstante, ya podemos prever que para el año 2025, un 30% de las auditorias de negocio serán realizadas por IA.
Esto también influye sobre la pérdida de empleos, razón por la cual las nuevas generaciones deberán adaptarse a un mundo demasiado volátil y cambiante. Este tipo de cambios traerá también nuevas convulsiones que pueden desembocar en nuevas configuraciones sociales.