Entre los inversores no hay dudas de que el índice S&P 500 es el mayor faro cuando se trata de evaluar el rendimiento del mercado de valores de Estados Unidos, por lo que no es sorpresa que este sea uno de los principales índices de referencia para una gran variedad de fondos en las carteras de un sinfín de inversores experimentados.
Pero es importante entender el S&P 500 para invertir en él con éxito.
Contenido
¿Qué es el índice S&P 500?
El propósito del índice SP500 es simple: medir y registrar el rendimiento de las quinientas empresas estadounidenses con mayor capitalización de mercado siguiendo la rentabilidad de gigantes como Apple, Amazon, Microsoft y una gran variedad de empresas estadounidenses de diferentes sectores económicos.
Por su magnitud, el índice representa cerca de un 85% de la capitalización total del mercado de valores de Estados Unidos y alcanza una capitalización bursátil de alrededor de 39 billones de dólares.
Asimismo, gracias a sus características, el índice es un excelente indicador del estado actual del mercado, por lo que es capaz de influir de manera significativa en la economía estadounidense y en la global.
Cómo invertir en el índice S&P 500 paso a paso
Existen diferentes índices bursátiles dentro y fuera de Estados Unidos pero el S&P 500 es quizás una de las mejores alternativas para inversores principiantes, ya que brinda acceso a las principales compañías de uno de los mercados más valiosos del mundo, además de ofrecer unas comisiones y tarifas más bajas por no necesitar un gestor de fondos.
Si ya sabes lo que es el índice S&P 500 y deseas invertir en él, debes seguir los pasos a continuación.
- Crea una cuenta de inversiones
Existe una gran variedad de alternativas cuando se trata de elegir una cuenta de corretaje, por lo que la decisión debe basarse en tus características como inversor, tus objetivos y las tarifas y beneficios que estas te ofrecen.
- Fondos de inversión vs. ETF
Al invertir en el índice S&P 500, debemos hacer una comparación entre los ETF y los fondos de inversión. Si bien estos funcionan de manera muy similar, hay algunas características clave que pueden hacer la diferencia.
Los fondos de inversión suelen ser ideales para las estrategias de inversión a largo plazo y por lo general tienen un importe y plazo mínimo de inversión establecido. Asimismo, por sus características, es posible que los retiros anticipados impliquen tarifas y comisiones adicionales.
Por otro lado, en los ETF el precio varía constantemente durante el día y se compran y venden del mismo modo que las acciones. Además, estos ofrecen menos restricciones en lo que respecta a la cantidad y el plazo mínimo de tenencia, por lo que también suelen estar libres de comisiones y tarifas adicionales por motivo de penalizaciones como sucede con los fondos de inversión convencionales.
- Elige el fondo de tu preferencia
Ya sea que prefieras un fondo de inversión o un ETF, debes elegir fondos específicos para hacer tu inversión. Cada fondo tiene condiciones y características diferentes, por lo que es crucial estudiar los costes y comisiones antes de invertir el dinero de tu cuenta.
Asimismo, debes tener en cuenta que diferentes fondos usan como referencia diferentes índices bursátiles para ofrecer una tasa de rentabilidad específica, por lo que debes asegurarte de elegir un fondo que siga el índice S&P 500 si deseas invertir en este índice específicamente.
S&P 500: ¿invertir o no invertir?
Si bien es cierto que el índice S&P 500 ofrece acceso a las principales empresas que cotizan en el mercado bursátil de Estados Unidos, la decisión de invertir o no en este índice dependerá enteramente de tu estrategia de inversión y de tus objetivos generales.
En general, el índice S&P 500 se ha caracterizado por ofrecer una rentabilidad de alrededor del 10% anual a sus inversores y puede ser una excelente alternativa para inversores principiantes que desean evitarse el riesgo de elegir acciones individuales en las que invertir.
Asimismo, teniendo en cuenta que incluye 500 empresas de diferentes sectores económicos, se perfila como una gran opción para construir una cartera de inversiones diversificada.
¿Por qué el S&P 500 y no otro índice?
No hay una respuesta que funcione para todos los inversores. El índice S&P 500 es uno de tantos índices bursátiles que los inversores y analistas utilizan para crear estrategias de inversión rentables.
Uno de los índices más representativos, además del S&P 500, es sin duda el índice Dow Jones Industrial Average.
A diferencia del S&P 500, el índice Dow Jones solo registra el rendimiento de treinta de las empresas líderes cotizadas en Estados Unidos y no incluye empresas de servicios ni de transportes, por lo que se trata de un fondo considerablemente menos diversificado. Aunque el Dow Jones, el S&P 500 y otros índices con diferentes características pueden fluctuar de manera similar a través del tiempo, la elección de uno u otro depende de cada inversor y de las necesidades de su portafolio de valores.
Sin embargo, debemos destacar que los fondos basados en el S&P 500 se consolidan como opciones sólidas para todo aquel que desee invertir en las principales compañías estadounidenses.